El Ayuntamiento de Alicante trabaja en la recuperación y puesta en valor de un nuevo yacimiento arqueológico en La Almadraba, donde se han encontrado restos de una villa romana vinculada a Lucentum, que estuvo operativa entre los siglos III a. C y IV d. C., que se van a musealizar para que se puedan recorrer y conocer. Se trata de una zona en la que ya se habían realizado algunas catas arqueológicas en 2009, que ahora se están completando en el marco del proyecto de reurbanización del entorno de La Almadraba. Como resultado de estos trabajos, se han encontrado cimentaciones de viviendas pertenecientes a una villa romana, abundantes restos de cerámica, algunos de ellos muy bien conservados, y monedas de la época, así como una balsa de combustión islámica. Aún se está trabajando en la excavación del yacimiento por parte de la empresa especializada Arpa Patrimonio, con la supervisión del departamento municipal de Patrimonio Integral, por lo que podrían aparecer más hallazgos.
«Con el descubrimiento y puesta en valor de esta villa romana sumamos al rico patrimonio arqueológico de Alicante un nuevo yacimiento de incalculable valor, que convertiremos en un museo al aire libre para que los alicantinos y visitantes conozcan mejor el pasado de la ciudad”, destaca el alcalde, Luis Barcala, que ha supervisado los trabajos de excavación del yacimiento junto a los concejales de Urbanismo, Rocío Gómez, y Cultura, Antonio Peral.
Una vez se completen las tareas de excavación, se llevará a cabo un proceso de musealización y puesta en valor de los hallazgos. Así, está previsto que las estructuras de viviendas encontradas, de las que en estos momentos apenas quedan los cimientos, se recrezcan al menos en algunos puntos para que los visitantes conozcan cómo eran estas estancias. Además, se instalarán pasarelas peatonales de madera con las que se podrá realizar un recorrido que permita contemplar de cerca estas estructuras, así como paneles con información sobre los hallazgos.
El yacimiento romano quedará integrado en el entorno reurbanizado y renaturalizado de La Almadraba, una actuación que se está ejecutando en estos momentos y que contempla una inversión de 5,1 millones de euros.
Hallazgos
El yacimiento romano de La Almadraba, en el que ya se habían realizado algunas catas arqueológicas en 2009, ha revelado, además de las estructuras de viviendas, monedas y abundante material cerámico, en algunas ocasiones muy bien conservado, que da una valiosa información de los momentos de ocupación del yacimiento. Se han documentado cerámicas campanienses (entre el s. II a.C. y el s. I d.C), cerámicas ibéricas pintadas, monedas del período de Antonino Pío (138-161 d.C.), ‘terras sigillatas’ de diversa procedencia y tipología con cronologías entre el s. I y III d.C., cerámica de paredes finas del s. I d.C. y cerámica común de diversa tipología y procedencia.
Esto permite deducir que en la zona se dio una ocupación bastante prolongada en el tiempo, entre los siglos III a.C. y el IV d.C. a juzgar por algunos de los materiales encontrados, siendo el momento de mayor esplendor los siglos I-II d.C. en época altoimperial romana, ya que las cerámicas más lujosas son de estos momentos. El yacimiento guardaría relación directa con la cercana Lucentum, aunque con una ocupación más amplia en el tiempo.
Reurbanización del entorno
La reurbanización del entorno de La Almadraba está incluida en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia y, en concreto, del Plan Territorial de Sostenibilidad Turística en Destino, financiado con fondos europeos Next Generation.
Además de la puesta en valor del yacimiento arqueológico, la actuación contempla la regeneración ambiental de La Almadraba y la creación de nuevos espacios de esparcimiento en un área de actuación de 25.000 metros cuadrados.
Redactado por el Grupo Aranea y ejecutado por Mediterráneo de Obras y Asfaltos, el proyecto de urbanización prevé diversas actuaciones para mejorar las características de movilidad, accesibilidad y seguridad.
Además, crearán un sistema sostenible de drenaje en caso de lluvias fuertes que permite reducir la velocidad del agua de escorrentía, canalizando sus recorridos. Para ello se construirá un aljibe de 786 m³ con la función de retención de las lluvias y su posterior vertido a la red, así como un canal abierto que permita minimizar los arrastres a la playa y un canal filtrante.
En paralelo, está prevista la restauración paisajística y renaturalización del entorno para generar un espacio más atractivo con nueva vegetación y con una actuación de conservación de la ya existente, al tiempo que se modificará la topografía para conseguir recorridos peatonales accesibles. Las calles Corbeta y Almadraba se peatonalizan para potenciar el carácter de parque situado junto al mar y con ello mantener su esencia de espacio natural dotado con mobiliario urbano, zonas de descanso, juegos infantiles, lavapiés, fuentes, aparcabicis, pasarelas de madera y de hormigón, sillas y bancos. Aprovechando la actuación, se renovará el colector existente.
Por otro lado, trasladarán el quiosco que estaba situado en Dominio Público Marítimo Terrestre a una zona verde acondicionada con el objetivo de activar el espacio público generado y se sustituirá el edificio de servicios de emergencias del Ayuntamiento por una pieza semienterrada con una cubierta vegetal.

Comentarios