La revista científica Anales de Literatura Española, editada por el Departamento de Filología Española de la Universidad de Alicante (UA), se ha situado en el primer cuartil (Q1) de las revistas científicas a nivel internacional, lo que la convierte en la única revista de la UA con esta distinción. La clasificación Q1 del ranking JCR de la Web of Science (WoS), está reservada a las publicaciones más citadas y con mayor impacto dentro de su área de conocimiento y representa un sello de excelencia científica, especialmente exigente en el ámbito de las Humanidades.

La noticia ha sido recibida con gran satisfacción tanto por el equipo editorial como por la comunidad académica. En palabras del decano de la Facultad de Filosofía y Letras, José María Ferri Coll, este logro «es una excelente noticia no solo para la revista y sus autores, sino también para toda la Facultad de Letras. Estar en Q1 implica situarse entre el 25 % de las mejores revistas científicas del mundo, y eso tiene mucho mérito, especialmente en un campo como el de las Humanidades, donde es muy complicado alcanzar este reconocimiento”.

Anales de Literatura Española nació en 1982, con el impulso de los profesores de Literatura Española de la UA, quienes vieron la necesidad de crear un espacio de difusión académica que recogiera tanto las investigaciones propias del departamento como las contribuciones de destacados especialistas internacionales en Historia de la Literatura Española.

Desde entonces, la publicación ha buscado combinar las principales líneas de investigación del área con estudios de reconocidos hispanistas de todo el mundo. Actualmente, se ha convertido en una referencia clave en el estudio de la literatura española desde el Modernismo hasta la actualidad, una especialización que, como explica su actual director, Juan Antonio Ríos Carratalá, ha sido esencial para su posicionamiento:

«Anales de Literatura Española es una revista veterana. El primer número fue dirigido por el profesor Guillermo Carnero, y ahora acabamos de sacar el número 43. En 2020, poco antes de la pandemia, asumí la dirección junto con los profesores Davide Mombelli y Laura Palomo como secretarios. Desde entonces, emprendimos una profunda renovación que ha sido decisiva para alcanzar esta visibilidad y reconocimiento académico».

El cambio en la gestión de la revista supuso una transformación integral de sus procedimientos editoriales, adaptándose a los más altos estándares internacionales de calidad científica. «Hasta 2020, la revista combinaba números misceláneos y monográficos con cierta irregularidad, e incluso hubo años sin publicación. En apenas cuatro años, hemos pasado de no estar indexados a posicionarnos en lo más alto del ranking. Esto ha sido posible gracias al apoyo del Servicio de Publicaciones de la UA, cuya asesoría ha sido clave tanto en la edición impresa como digital”, explica el profesor Ríos.

Entre los cambios más significativos está el paso de una publicación anual a dos números anuales, de aproximadamente 300 páginas cada uno. El número monográfico, que aparece en enero, se realiza en colaboración con grupos de investigación de otras universidades, promoviendo así el intercambio académico. El número misceláneo, por su parte, se publica en junio y recoge una selección abierta de investigaciones.

Además, se ha fortalecido el compromiso con la promoción de jóvenes investigadores, lo que ha generado una respuesta muy positiva por parte de la comunidad académica emergente en el campo de los estudios literarios.

Un legado consolidado

El éxito actual de Anales de Literatura Española no es solo fruto de un esfuerzo reciente, sino de una trayectoria sostenida en el tiempo y de una estrategia de modernización sin incremento presupuestario, respaldada por el Vicerrectorado de Investigación y la Facultad de Filosofía y Letras.

«Publicar dos números al año implica una gran carga de trabajo para un equipo reducido, pero el proceso está ya completamente normalizado. Si todo sigue su curso, alcanzaremos en pocos años el número 50, momento en el que me jubilaré. Dejaré la revista en manos experimentadas, con un relevo generacional plenamente consolidado», concluye Ríos.