Tiñalpa

Un ínclito académico de la lengua y bestseller ha remozado el término “tiñalpa”, que se usaba en su terruño en tiempos de Maricastaña. En sus propias palabras es “un pobre hombre, un don nadie”. Lo aplica también  a quienes en época de canícula visten de corto, chanclas y camiseta de tirantes, o sea al noventa y nueve coma nueve por ciento de la población en esta sartén mediterránea azotada por el siroco africano inclemente.

Lejos queda el tiempo en que el insigne periodista usaba cazadoras bélicas y casco, envuelto en harapos heroicos en las trincheras del mundo. Ahora viste como un lord inglés, de tweed , chaqueta de ante , zapatos de gamuza color caramelo y hasta pajarita. No extraña que use el viejo palabro cartagenero para denigrarnos a los que no llevamos chinos y camisa azul celeste de manga larga estilo pepero en plenocaloret .

A mí no me gusta demasiado el uniforme estival, bermudas y sandalias, que hace que todos parezcamos pobres mendicantes. Pero aporofobias aparte y clasismos indumentarios, es lo que hay, señor académico.

El filósofo francés Jean Baudrillard dijo que cada clase social se distingue por su sentido del gusto particular. La indumentaria “tiñalpa” ha abolido en parte las diferencias, pero si hilamos fino descubriremos que hay camisetas blancas básicas que cuestan un riñón , sandalias estilo italiano y gorras de moda que valen un ojo de la cara. Y últimamente, la moda de los calzados barefoot, que pese a parecerse a los de los payasos de la tele se cotizan a precio de oro.

Dinosaurios nocturnos

Un amigo , sanvicentero de pro y derechoso, aunque él se dice “anarquista”, me recomienda un programa de es radio, Cowboys de medianoche, en el que participan como tertulianos ancianas glorias: un viejo director de cine, un viejo poeta, un viejo diplomático,  un viejo periodista y un jurista, también muy mayor. Líbreme Dios del edadismo, ya que soy bastante viejo también. Pero este programa radiofónico destila lo peor de lo viejuno cuando evocan cosas del pasado o utilizan expresiones que remiten a políticos de hace medio siglo. La sintonía, de la película famosa, también es bastante antigua (yo la vi en estreno, pueden figurarse). En el podcast que escuché sonaron Los Sabandeños,  banda multitudinaria de temas folclóricos y boleros, que como residente en Canarias durante un cuarto de siglo soporté estoicamente. Dicen que eran tantos, que no cabían en los avioncitos de Binter que hacen las rutas aéreas interinsulares.

El programa  , dice Wikipedia (que está muy pesada pidiendo dinero a sus usuarios) “gira  alrededor de la cinematografía actual y de  lo intemporal”. O sea, de lo acrónico, de lo que está fuera del tiempo. A mí se me asemeja a la mujer de Lot,  mirando en dirección a un pasado en el que había vaquerías en el centro de Madrid o cuando Pedro García Cuartango perdía la fe por la muerte de un chico de su edad. La nostalgia es un error, no sé quién lo dijo. La memoria me falla, afortunadamente. Y que Dios, en el que no creo, me libre de contar batallitas como el abuelo Cebolleta.

Mi amigo, que espero que lo siga siendo después de leer esto, dice que a él le da lo mismo quien gobierne, al final todos corruptos. Pero votará a la derecha, si es que se lo permite su anarquismo sui generis. Dice que tras toda una vida laboral como autónomo tiene una pensión tiñalpa , pese a que los autónomos son los que más mueven la economía nacional. Según las últimas estadísticas hay más de dos millones y siguen creciendo gracias la crisis del empleo. El portavoz de las asociaciones de este sector , Lorenzo Amor , señala que las perspectivas son peores que las de 2024 debido a la incertidumbre económica, la subida de las cotizaciones y el exceso de regulación. Dudo que el advenimiento de la coalición PP-VOX mejore su situación. Y mi querido amigo anarco populista, como tantos jubilados, que  invierte su exigua pensión en ayudar a los suyos, mejore la suya.

Es turismedestrueix

Veo un reportaje a Lanzarote (Con vistas al mar, El escarabajo verde, La 2) esa isla canaria donde pasé un cuarto de mi vida, veintitantos años, casi nada. Se  pretendía reflexionar sobre los límites del crecimiento y la carga ecológica que sufre ese pequeño territorio donde nació César Manrique, el genial artista que fue un adalid de la conservación natural y arquitecto (sin escuela) de monumentales proyectos que aún conservan su legado, como el anfiteatro natural en un tubo volcánico llamado Jameos del Agua, el Jardín de Cactus o el parque natural de Timanfaya. Llegué allí en 1992, días después de su muerte a causa de un fatal accidente. Y pude ver el declive de Lanzarote, amenazada por la corrupción y el caciquismo, como denuncian las personas entrevistadas, excepto las de la patronal turística que se escudan en una creación de empleo (que no beneficia a todos) para defender su expolio. En su momento estuve en el grupo inicial de Cuadernos del Sureste, publicación ecologista que fue posteriormente secuestrada por la mafia turístico-política-judicial insular. No pusieron nombres a esa mafia en el reportaje de La 2, pero yo los conozco. Una figura destacada fue el diputado y presidente del Cabildo Insular, Dimas Martín , con la complicidad de varios alcaldes, magistrados y abogados. También periodistas. Detrás, en la sombra, la figura del empresario  Juan Francisco Rosa, perpetrador de atentados contra el medio ambiente como establecimientos hoteleros, uno en la antes idílica playa de Papagayo y una bodega en el espacio protegido de La Geria. No paró hasta hacerse dueño de uno de los principales medios informativos insulares, amplificando así su poder.

 “Es turismedestrueix “:El turismo destruye, decían los ecologistas del GOB en Menorca, donde viví diez años.  Otro territorio entregado al capitalismo salvaje que viene también del extranjero. Lo que destruye es la codicia,  el poder de la pasta gansa , que ha acabado con espacios naturales en los archipiélagos españoles y en el litoral levantino, entre otros muchos.

Feria sanvicentera

El domingo de Pentecostés se celebró la primera edición de la feria del libro en San Vicente del Raspeig. Hasta la Plaza Juan XXIII llegaron libreros, autores locales y comarcales y alguna autoridad edilicia. Mucho público, no. Tal vez el calor, el horario (partido desde las 8 y hasta las 20 horas) conspiró, a lo mejor el sitio escogido, alejado un poco del centro no haya sido el idóneo. Daba un poco de penita ver que donde tocaban unos músicos entusiastas había más gente en el escenario que publico. Y más niños en el parque anexo que en los talleres organizados para ellos.

Charlamos unos momentos con la autora de Villajoyosa Susi Rosa Egea, que ha publicado algunas novelas de tipo feminista/erótico y que ha ganado ya varios galardones. A ella, como a todos los demás, les deseamos que sigan en su empeño, aunque a este juntaletras escribir literatura le parece un salto mortal frente a la Eternidad.

Y a las autoridades municipales de mi ciudad les insto a repetir el evento, con mayor difusión y mejor emplazamiento, si es posible.